Muy cerca de la ciudad de Oaxaca, en el pueblo alfarero de Santa María Atzompa, además de las tradicionales ollas y jarros que conocemos, los artesanos también elaboran figuras de animales, los cuales colocan en el altar para la Virgen de Dolores en el 6to viernes de cuaresma y durante la Semana Santa. Estas figuras lucen por el color verde vidriado y el germinado de chía que siembran posterior al Cuarto Viernes de Cuaresma, es importante aclarar, que esta tradición se realiza en gran parte del estado, pero es Atzompa, el principal productor de las figuras de barro.

 Sobre una de las calles principales de Atzompa, se localiza el domicilio del Sr Cándido Ramírez, artesano por herencia, quién desde muy joven comenzó con la elaboración de estas piezas al lado de su esposa (QEPD). Con meses de anticipación, elabora las piezas, pues durante la cuaresma la gente acude a su domicilio para adquirir diversas figuras, las cuales exhibe en un local sobre la calle principal: ángeles, venados, borregos, chivos, cabritos, perros, toros, tortugas, ranas, búhos, conejos y cochinitos, con chía y sin chía, decoran dos mesas que atraen la atención de los clientes.

Desde muy temprano, el Sr. Cándido y su hija, Ofelia Ramírez, ya tienen listo el barro con el que crearán las piezas. Con moldes de yeso o barro, realizan el cuerpo del animalito, después agregan las orejas, los cuernos, la cabeza y las patitas, según del animal del cual se trate. Con mucha emoción y creatividad, los nietos del Sr. Cándido también participan en la elaboración de los animalitos. Usando materiales sencillos como carrizos, tapaderas, peine o tenedores, forman la boca y los ojos del animal, así como los surcos donde impregnarán la chía.

En un cuarto grande y fresco, van colocando todas las piezas para que estas se sequen durante algunos días, pasado este tiempo, las figuras se hornean y después se dejan enfriar. A un lado del horno, el Sr. Cándido y su familia añaden el barniz líquido sobre la cabeza de la figura ya horneada, este barniz es el mismo que le dará el color verde y el aspecto vidriado a la pieza después de un segundo horneado, esta textura es la que caracteriza a la alfarería de Atzompa.

 La chía se siembra posterior la 4to viernes de cuaresma. La pieza se remoja al igual que la chía, una vez que esta ha adquirido su consistencia gelatinosa, se adhiere al cuerpo de la figura, en un orificio, se llena de agua para que la semilla se mantenga húmeda y pueda germinar, para esto la pieza deberá reposar en un lugar oscuro por alrededor de 4 días.

Una vez germinado, se retira de la oscuridad y se va nutriendo de agua para que el germinado continúe creciendo. Junto con germinados de trigo y milpa, la pieza con chía se coloca en el altar de la Virgen de Dolores. Esto es una ofrenda a la virgen con la que se pide abundancia en las cosechas, pues estos días coinciden con el inicio de la temporada de siembra.

Agrademos Al Sr. Cándido y a su hija, la Sra. Ofelia, por abrirnos las puertas de su hogar para la elaboración de esta nota. Ellos invitan a todos los que gusten conocer el proceso o adquirir algunas de sus obras a pasar a su domicilio, ubicado sobre la Av. Libertad 406, en Santa María Atzompa, antes de llegar al mercado de artesanías. También, pueden contactarlos al número celular 951 346 9540.

Contenido por: Helí Morales