Del 17 al 22 de noviembre, la comunidad de San Cristóbal Lachirioag llevó a cabo su festividad anual en honor a su Santo Patrón: San Cristóbal Mártir, considerado patrono de los viajeros, una de las festividades más grandes de la población, donde las bandas filarmónicas y las danzas inundaron estos días de fiesta.
Las actividades comenzaron el viernes 17 con el recibimiento de las bandas filarmónicas, lo cual implica unas palabras de bienvenida, un recorrido hacia la iglesia, la bendición y un rosario por parte de los visitantes; este año, estuvieron presentes las bandas de las poblaciones de Talea de Castro, Santa María Tiltepec, Santiago Camotlán y Santiago Laxopa, además de las bandas municipal y escolar infantil de la población, quienes amenizaron los diferentes eventos religiosos y sociales. Caída la noche, se realizó la calenda, recorriendo las principales calles y haciendo paradas en diferentes puntos importantes de la población, donde los asistentes se deleitaban bailando los sones de la región norserrana.
El día domingo, día principal de la festividad posterior a la interpretación de las mañanitas en la Capilla de Santo Lugar, se realizó el desfile de bandas, evento que se ha vuelto tradición en el pueblo de Lachirioag, el desfile partió y culminó en la misma capilla. Más tarde, se presentó la danza de San José, danza que representa a la sagrada familia, así como algunos estilos de crianza en los pueblos zapotecos norserranos. Caída la noche, se hizo la despedida a la banda de Santiago Camotlán en la casa de comisión, posteriormente, se continuó con el baile popular.
Para el día lunes 20, se hizo la presentación de La Danza de Los Negritos, una de las máximas danzas de los pueblos zapotecos de la región, pues sus pasos requieren de mucha agilidad, coordinación y sincronía. Por la tarde, se realizó la audición musical en la cancha municipal, donde cada una de las bandas visitantes y locales mostraron a propios y extraños la riqueza musical que domina la región.
De esta forma, San Cristóbal Lachirioag reafirma su identidad zapoteca en la preservación y realización de estos eventos, los cuales, mantienen lazos de hermandad con otras poblaciones.
La danza y la música, como una forma de vida.
La dinámica cultural de los pueblos norserranos ha permitido la difusión de diferentes danzas entre los pueblos y la creación de más una banda filarmónica, lo cual se deja ver en las principales festividades. Maestros ha salido de sus comunidades para compartir sus conocimientos en otros lugares no solo musicales y dancísticos, también el conocimiento indígena zapoteca.
La habilidad adquirida en la ejecución de los instrumentos ha brindado oportunidades viaje y de estudio en otros estados y países para los jóvenes de la región, lo cual es una motivación para continuar con el aprendizaje y la enseñanza musical.
Contenido por: Helí Morales
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"Tierra de dioses que nunca mueren"
2023
